Revisando feed de instagram me encontré alguna vez con una publicación de un envase rojo vivo. Lo comencé a seguir porque era de mi pueblo, Maturín. Y así me topé con este emprendimiento hermoso: Alimentos Wiñy.
Como estaba próxima a viajar a mi ciudad natal y sabía que iba a pasar varios días, les escribí para planificar nuestro encuentro. Fue a unas horas noctámbulas -propias de los que llevamos a cabo nuestros sueños- me contestó. ¡Si amiga, a la orden! Y me dije…¡Ja, lo sabía! Es de las mías.
Nunca tengo expectativas por absolutamente nada en la vida. Más si las hubiese tenido, Carmen Susana las hubiera sobrepasado en en 3000%.. Sigue leyendo para que te enteres de cómo fue nuestro encuentro.
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Alimentos Wiñy: Más allá de un nombre original.
Y al final así fue. Después de hacer otra edición de ” una vuelta por Maturín 259 ” con Silvia Sánchez y más enamorada aún de mi tierra, pues no podía irme sin encontrarme con los padres de la criatura.
Quedamos en tomarnos un café. Pero no fue tan sencillo.
Fue la cátedra más increíble que haya tenido jamás de un producto de nuestra tierra, que solo cuando estamos fuera de ella lo valoramos con más peso: El ají dulce.
– ¿Por qué hacer un chutney de ají dulce?
Porque no lo había visto en ninguna parte, -me contesta- . Una vez tenía muchos en mi cocina en una cesta. Grandes, bellos y rojísimos. No sabía que hacer con tantos. Así que los procesé, y fuimos llevando esa “salsa” a reuniones familiares y con amigos. Todos nos comentaban que debíamos comercializarla. Me comenzó a rondar la idea en la cabeza, de lo que hoy es nuestro producto emblema.
– ¿Fuiste de pequeña de esas que vendía cosas en el colegio, de típica comerciante?
Si, totalmente. Ayudaba a mi papá con sus cosas también. Muchas de las que él comercializó eran productos de la tierra: Yuca, maní, entre muchos otros.
Claro que primero que nada está la familia. Desde siempre tuve la inquietud, pero mis hijos eran pequeños. Cuando ya crecieron un poco y tuvieron cierta autonomía, fue que me dije.¡Este es mi momento!
– ¿De dónde sale ese nombre tan particular?
Tiene su historia. Es de una niña delgadita, pecosa y achinadita que tenía un tío muy gracioso que se le ocurrió llamarla así: wiñy. Tal vez era de esa personalidad con mucha espontaneidad y que no paraba de hablar estando entre adultos. Con un pequeño detalle: ¡No pronunciaba bien las palabras! Pero era por su corta edad. Sin embargo tenía una gran actitud, como llamaríamos ahora. Esa niña, soy yo.
Alimentos Wiñy. es un emprendimiento es familiar también. Mi esposo Carlos Prosperi me apoya en un 100%, aunque yo sea la que vaya a los eventos y la que haga la parte de marketing. Él es ese brazo técnico que también ha hecho gran parte de este nuestro sueño posible.
Ahora quiero que Wiñy seamos todos. ¡No hay nada más venezolano que el aji dulce! Y yo a través de casi dos años he trabajado con ajíes de muchas regiones de Venezuela: el de oriente es el más fragante.
El Ají dulce venezolano es una variedad nativa del Capsicum chinense, el Capsicum annuum y Capsicum ftutescens. El capsicum o la capcsaicina es un elemento que produce un pequeño picor y se encuentra concentrado en las semillas y membrana del ají. Este picor estimula la producción de endorfinas, unas hormonas que nos provocan el placer y la alegría(…)
En Venezuela podemos encontrar su cultivo por todo el país, pero donde encontramos las variedades con mejor sabor y olor es en la zona oriental, en especial en la Isla de Margarita; el famoso Ají Dulce Margariteño
Fuente: Yo soy venezolano.com
– Sé que no me vas a contar cómo se hace, pero ¿Qué has descubierto en todo este camino desde que comenzaste hasta que este hijo vio la luz?
Desde el día que me decidí, tuve la intención de no hacerlo a lo loco. Llevó preparación de mi parte, no solo desde el punto de vista de conocer muy bien el fruto para que la calidad fuera óptima, sino también en el área de los negocios. Para emprender, si no quieres tropezar demasiado necesitas prepararte.
Otra lección reciente es saber en que época del año está la cosecha óptima para mi producto. En los primeros meses del año no hay mucho y de hecho por eso es que se encarece.
Por eso, un punto importante es que esos meses sirvan para hacer otros procesos y trabajar con el stock que se haya sacado en las producciones anteriores. Eso es posible porque nuestro chutney duradero. Puede estar más de un año en perfectas condiciones.
Por ejemplo ahora estamos probando otras combinaciones y otros productos con nuevos sabores. Eso nos permitirá alternar cuando haya escasez de alguno, trabajar en otra materia prima. También buscamos alianzas con productores para tener una cosecha ya pre-seleccionada.
– ¿Además de tu esposo , tienes a más personas en el equipo?
Buscamos a un tecnólogo de alimentos que nos apoyara en optimizar las bondades del producto y su conservación. Fue una gran suerte que Rubén Jaramillo hoy en día trabaje con nosotros. Es un ser generoso y además profesor universitario de mucha experiencia.
Hasta ahora la producción dentro de Alimentos Wiñy se hace en la cocina de casa. Son jornadas muy organizadas donde solo nos dedicamos a eso, hasta que procesamos todo el lote. Se transforma en laboratorio, donde estamos nada más los del equipo y yo. Es la forma de garantizar su calidad, pureza y durabilidad.
¡Y al fin tuve la dicha catar su sabor! Que cosa tan increíble. Ese día pues lo probé con galleta de soda. Pero luego en casa lo coloqué sobre un pollo a la plancha que hizo mi mamá y en verdad que el resultado fue excepcional. Puede ponerse a todo tipo de carnes. Con los perros calientes y las hamburguesas es la sensación.
Los chutney vienen de la India y se tropicalizaron por la migración de gente de esas tierras lejanas a las antillas. La isla más cercana a nosotros es Trinidad y Tobago. Siempre se busca el contraste de sabores de una fruta cítrica y son muy conocidos los de mango y tamarindo -al menos por mi-. En Venezuela, en la región de Paria, hay influencia en los platos por la cercanía que tienen con la isla antes nombrada.
Entre emprendimientos, en la unión está la fuerza.
Días después de nuestro encuentro, Carmen Susana estaba en la planificación de un evento de emprendedores locales. Me contó que la idea era que se fueran conociendo y estableciendo nexos útiles para apoyarse en sus diversas actividades
De hecho Alimentos Wiñy tiene ya alianzas con otros emprendedores gastronómicos. Uno de ellos hace unos tequeños que tienen ese toque mágico del ají dulce. Esta variedad es de las primeras que se agotan y ya es favorita entre sus clientes.
¡Qué más puedo decirles de esta paisana? Solo que le sigan el rastro a Alimentos Wiñy, porque estoy completamente segura que al cabo de corto tiempo estará disponible en todo el país. Corran la voz y no se pierdan más historias de nuestros emprendimientos luminosos.
Coordenadas: Instagram @Alimentoswiny
Dios se me hizo agua la boca, no más de ver la foto de los tequeños , yo que soy súper fanática de las salsas, aderezos y por supuesto el chutney . Uff que delicia, gracias por esa información. Donde se pueden conseguir en caracas??
Hola Suly. Los consigues en mi nevera, jajaja. Aún no tienen distribución a ciudades principales, pero estoy segura lo lograrán muy pronto. Ya te anoto de primera en la lista cuando Carmen venga a Caracas. ¡Saludos y gracias por pasar por aquí!